Hace un mes u algo descubrió que va a ser papa.
En este mismo día, dediqué todos mis pensamientos a ello, mientras iba dibujando.
Me salió algo del inmenso árbol de Mango donde hemos pasados momentos de mágica infancia en el pueblo de mi abuelo.
Le nombré al dibujo, por eso, El árbol de la Vida.
Que nada tiene que ver con la película del director Terrence Malik, "The Tree of Life", recién estrenada, aunque yo haya rotulado al dibujo en los mismos días de su estreno.
No había oído o visto nada sobre tal película, hasta que unos días después del dibujo me encontré con un cartel sobre la peli.
Uno de estos momentos en que parece que el mundo como una entidad sobrenatural tiene oídos a tus pensamientos, una de estas cosas del tal inconsciente colectivo.
Todavía no le he visto, a la peli del director.
Pero no importa, este post y su ilustración van dedicados al árbol de mi vida que vuelta y media aparece para recordarme de los momentos que realmente importan al final del día.
La ilustración expresamente no tiene definición perfecta , ya que el diseño original espera en el cajón para ser regalado personalmente a su dueño en un próximo encuentro.
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